Trinitarias, nuestra misión en Madagascar

Lo siguiente que vais a leer, ha sido publicado en una revista trinitaria que se llama El Venerable Félix de la Virgen. Nos ha parecido interesante publicarlo en este blog porque, nosotros que estamos viviendo in situ toda su labor; las palabras aquí publicadas, se ajustan a la realidad.

Por eso, sólo pediros: leerlo despacio e intentando imaginaros la situación en cada momento.

Nosotros admiramos y queremos a Aurora; cada día, nos demuestra su generosidad y calidad humana.

Muchas gracias por compartirlo con nosotros.

No os ponemos fotos porque no contamos con ninguna y tampoco se las queremos pedir a Aurora porque ella no tiene ni idea que hemos publicado esto.

Bueno sólo una foto que hemos encontrado en internet para que la conozcáis.

En Tarancón, en un concierto benéfico

1.- LLEGADA A ANTSIRABE

1992, año de aterrizaje en Madagascar. Aurora,Moreno, María Filomena Costas, Angelines Macho y Filo Alvarez, más tarde se incorporaría la hermana colombiana Luz Dina Carrero, fueron las primeras Hermanas Trinitarias de Valencia que arribaron a Madagascar, concretamente a Antsirabé donde el trinitario P.Luis Jañez(q.e.p.d.) les ayudó en unos comienzos que no fueron nada fáciles; era necesario aprender el malgache, el francés y hacerse a las costumbres del país…Al poco de llegar, sin excesivo tiempo para adaptarse, - la urgencia de la pobreza de la gente no les permitía entretenerse-, comenzaron a acoger a niños en la casa. Había que lavarles, vestirles, darle de comer. Fue una casa convertida pronto en pequeña escuela. ¡Eran tantos los niños que andaban por los caminos!. Niños, muchos niños hambrientos, desnudos, sin escuela. Sus miradas se les clavaban en el corazón y no podían esperar. Sus gritos silenciosos eran un clamor por la libertad; esos rostros de los niños les empujaron a acogerlos aun sin tener escuela.

1.1.-ATENCIÓN MISERICORDIOSA LIBERADORA 

Como una hermana era enfermera empezaron a prestar ayuda sanitaria a los enfermos que se acercaban, educaban en principios de higiene elemental a las jóvenes, a las mujeres casadas, enseñaban a cuidar a los niños, la casa… Hacían lo que podían con su escaso conocimiento del idioma. Los gestos de la gente que les pedían ayuda y las pequeñas respuestas de las hermanas a sus demandas eran su idioma común.

Comprobaron, día a día, que el idioma de los gestos es muchas veces más eficaz que las palabras.

Estos comienzos de nuestra presencia en Madagascar significaron la misma experiencia que nuestra Congregación tuvo en sus orígenes en Valencia. Los niños, que deambulaban por las  calles todo el día…fueron el clamor que urgió a nuestras Fundadoras a iniciar una escuela como respuesta misericordiosa-liberadora a sus carencias:  acogerlos en casa, cuidarlos, enseñarles a leer, escribir, cuentas, la doctrina cristiana, pero sobre todo quererlos, quererlos mucho, mirar a los pobres con corazón compasivo, escucharlos, y ofrecerles nuestras manos y nuestros pies como ayuda.

Las trinitarias de Antsirabe además de dedicarse a tareas educativas en el colegio, de trabajar en el dispensario y en la maternidad, atienden también a enfermos en sus casas, actúan de catequistas, visitan a presos en la cárcel, cuidan a 12 niños huérfanos que viven con las hermanas en su misma comunidad.

1.2.-COLEGIO VIRGEN DEL REMEDIO

Fue pasando el tiempo y la historia de nuestra misión trinitaria en Madagascar estaba ya iniciada y en marcha. En 1994 las hermanas inaguraron una escuelita para niños de 3 años, construyeron también un comedor para unos 100 niños con las ayudas que les enviaba la Congregación.

Hoy, año 2013, la escuela se ha hecho grande y hay 730 niños-as con edades comprendidas entre los 3 y los 14 años. El colegio se llama “VIRGEN DEL REMEDIO”. Los alumnos salen del colegio con el Primer Grado de Educación Secundaria que es el nivel para el que está autorizado. Los padres les piden el Segundo Grado de Secundaria pues los niños salen muy bien preparados y con muy buenos resultados en los exámenes oficiales. En el colegio hay 12 maestros y 3 hermanas.

La tarea no es fácil pero lo hacen, -dicen-, con mucha ilusión y alegría. Las hermanas trinitarias están convencidas de que la educación es una acción liberadora y una ayuda a los niños/as y a los padres para ser más persona y para crear pequeños espacios de libertad y justicia en el lugar donde se encuentran.

1.3.-DISPENSARIO-MATERNIDAD

También en Antsirabe, desde el año 2004, las trinitarias atienden a enfermos en un pequeño dispensario que, además de curar enfermos, poco a poco se ha ido convirtiendo en una bonita maternidad. Dios mediante, la nueva maternidad se inaugurará el próximo 6 de enero de 2014. Cuenta con una médico y con hermanas que visitan también a los enfermos en sus casas.

Esta tarea-misión sanitaria está resultando difícil, pues los enfermos están acostumbrados a tratarse con métodos ancestrales, esto es, con ungüentos hechos con hierbas medicinales y les cuesta mucho acercarse a los médicos. Lo mismo sucede con las mujeres que dan a luz, lo hacen en sus casas atendidas por vecinas, por sus madres y familiares. Por eso este servicio tan necesario para mejorar la salud va progresando lentamente. El Ministerio de Sanidad del País está tomando medidas muy importantes para que los enfermos y las mujeres que van a dar a luz acudan a los centros de salud para evitar problemas de infección y muertes. Y más importante todavía es la formación que se les da a las mujeres para promover una maternidad saludable y enseñándoles habilidades para ir creando unas mejores condiciones sanitarias familiares.

1.4.-CASA DE FORMACIÓN

En Antsirabe tenemos además una casa de formación inicial para las jóvenes que desean formar parte de nuestro Instituto. La labor desarrollada por las hermanas trinitarias en Antsirabe ha sido tan hermosa y gratificante para la población local que ha sido bendecido por Dios de tal modo que hoy son 30 las religiosas nativas profesas y muchas más en periodo de formación. Y el mismo derrotero siguen nuestras fundaciones en Tananarivo y en Tsiroanomandidy.

2.- ANTANANARIVO-TSIROANOMANDIDY

La Comunidad trinitaria de Antananarivo-Tsiroanomandidy la constituyen hermanas que están en periodo de formación estudiando Magisterio, Teología y sacando el título de Matronas ya que es una de las necesidades más urgentes por la cantidad de madres que mueren en el parto-. Además todas desempeñan funciones de catequistas en la parroquia a la que pertenecen.

Las hermanas trinitarias de la Comunidad de Tsiroanomandidy, unas desarrollan su labor en el Obispado con el Obispo trinitario Gustavo Bombín, otras trabajan en un comedor para niños abandonados y también atienden a madres solteras.

Esta es hoy nuestra presencia en Madagascar: ayudar y dejarnos ayudar. Colaborar donde estamos para que los niños-as, sobre todo, pero también las personas mayores puedan conseguir un futuro mejor. Crear pequeños espacios de libertad en los que las personas se sientan mejor, se sientan más personas.

Bueno, sólo nos queda despedimos como todos los días, pero no olvidéis que estamos editando la 2ª etapa de viaje :):

Contamos con vosotros para ir cambiando esta realidad...poco a poco y, desde la humildad, hacer que el mundo evolucione a mejor y poder conseguir lo imposible.

Un abrazo

Julián&Álvaro